I
"Lune.”
Era
media mañana y el cielo estaba despejado, el ambiente era
alborotado, mucha gente recorría las calles de Nueva York. Entre
ellas un hombre de unos 24 o 25 años, alto, con un pelo castaño y
unos ojos azules como el hielo. Se dirigía a su casa, en ese momento
no se imaginaba que una sorpresa le esperaba en ella.
-¿Victoria,
estas segura de que podemos estar aquí?- preguntó Jack.
-
Seguro Jack, te he dicho que Christian me deja venir aquí cuando
quiera, además, será mucho mejor para la sorpresa- dijo Victoria
sonriendo. Ella estaba emocionada, hacía mucho tiempo que no lo veía
y desde entonces tenía una sorpresa para él.
Pasaron
los minutos pero al final llegó a su casa. Cuándo Christian abrió
la puerta alguien se le lanzó encima, Christian se asusto pero
enseguida reconoció a Victoria. Hacía mucho tiempo que no la veía,
siempre la echaba de menos pero no podía ir a Idhún así que la
recordaba a través de su anillo.
-Victoria...
–dijo él a media voz.
-Hola
Christian- dijo ella con los ojos empapados.
-¿Que
haces tu aquí?.. perdon-dijo mirando a Jack-¿que haceis aquí, en
la tierra?
-Hemos
venido a quedarnos, porque...- pero, antes de que acabara Christian
la besó.Había soñado con ese momento, el momento de poder volver a
besar esos labios que tanto había añorado, y ahora, le daba igual
que Jack estuviera delante. Cuando se separó de ella, Victoria se
dio cuenta de lo mucho que lo había añorado y le abrazó con
fuerza.
-He…
hola – dijo Jack con timidez, rompiendo el momento tierno entre
Victoria y Christian.
-
Jack – dijo Christian con una breve inclinación.
-
Erik ven a ver a Chirstian, ven y dale un abrazo- le dijo Jack. Erik
fue y le dio un abrazo, pero enseguida se escondió.
-¿Que
haceis aquí en la Tierra?-cambiendo de tema repentinamente-¿ha
habido problemas en Idhún?-preguntó Christian en tono serio.
-Tranqilo
luego te lo explicaremos todo, pero, primero ven, tenemos que
enseñarte algo- le dijo entusiasmada Victoria.
Le
condujo hasta su habitación y allí encima de su cama, yacía un
bebe dormido. “Otro bebé” fue lo primero que pensó. “Desde
luego Jack no pierde el tienpo” fue su siguiente pensamiento.
Victoria
fue y cogió al bebé en brazos con la intención de darselo a
Christian.
-Yo
no... no quiero que..-dijo, pensando en la primera vez que cogió en
brazos a Erick.
-Toma..-insistió
Victoria.
Finalmente
Christian cogió al bebe en brazos y cuando le miró a la cara, el
bebé abrió los ojos.
-
Te presento a Eva - dijo Victoria con los ojos llorosos.
-
... – Christian no emitió sonido alguno, solo se quedó mirando
mudo, a la niña que sostenia en brazos.
-Lune...-
dijo Christian porfin.
Victoria
comenzó a llorar, pero no de tristeza, si no de felicidad, y Jack la
abrazó. Los dos con una gran sonrisa en el rostro, obserbaron a un
Christian sonriente y emocionado, pero, sobretodo feliz. Un Christian
al que no estaban acostrumbaos a ver, destapando sus emociones tan a
la luz.
-Es
preciosa, ¿verdad?-dijo Jack.
-No...
es perfecta- dijo Christian.
De
repente la cara de Christian cambió. Ya no había esa felicidad,
volvía a ser el de siempre.
-
Habéis venido por ella ¿no?- dijo sin dejar de mirar a Eva.
-Si...-
contestó Jack,ya que Victoria, no pudo decir nada. Los tres se
dirigieron al salón, tenían mucho de que hablar.
Estaban
los tres sentados en el sofa del salón, juento a la chimenea que
tenía en el piso. Christian sugetaba a Eva. Desde que habían
llegado no la había soltado y la niña no lo había rechazado, ni
había pedido volver con su madre.
-Como
tu has deducido, vinimos por ella-dijo Victoria mirando a Eva y
rompiendo el siencio que se había formado- cuando Eva nació,
dejamos nuestra casa para instalarnos en un pueblo mas lejano de
Celestia, porque alguien contó al nuevo rey de Vanissar que yo
había tenido un nuevo hijo, pero no de Jack, sino de ti. Y aquello
no lo podian permitir, era un peligro para Idhún, según nos
dijeron.
-Entiendo...-fue
la contestación de Christian.
-Nos
avisaron que fueron a nuestra antigua casa, a buscarnos para capturar
a la niña y decidimos huir de Idhún-dijo esta vez Jack- y Shail nos
ayudó. Llevaba algún tiempo perfeccionando el como poder abrir la
puerta interdimensional y lo consiguió a tiempo- concluyó Jack.
...-Christian
solo asintió.
Victoria
y Jack se le quedaron mirando. Algo le estaba rondando por la mente y
no tenian ni idea de que sería, pero seguro que tenía que ver con
su hija.
-¿Os
habéis instalado en Limbhad?- preguntó Christian.
-Si,
de momento no quedaremos instalados allí, pero,he pensado que,
podriamos instalarnos en mi casa de Madrid, es suficiente grande para
los cuatro y alli podremos empezar nuestra nueva vida en la tierra-
contestó Victoria.
-
Me parece una buena elección-contestó Christian sin dejar de mirar
a Lune.
Victoria
le sonrió.
Los
siguientes días los pasaron en Limbhad los cuatro. Pero un día,
Victoria decidió ir a visitar a Christian ella sola, para poder
hablar con él. Cuando llegó no había nadie así que decidió
esperar.
Cuando
Christian llegó a casa ya era un poco tarde. Cuando entró se
encontró a Victoria dormida en el sofá. Se había quedado dormida
esperandole, pero, enseguida se despertó cuando el entró por la
ppuerta.
-¿Qué
haces aquí Victoria a estas horas?- preguntó Christian.
-
Quería hablar contigo,llegué y no estabas y decidí esperarte, pero
me he quedado dormida, lo siento- dijo Victoria un poco tímida.
-No
te preocupes- contestó Christian mientras se sentaba a su lado en el
sofá.
Victoria
no aguantó mas y le abrazó y él le devolvió el abrazo.
-Te
he echado de menos...- murmuró Victoria.
-Y
yo a ti criatura...-le contestó Christian, para luego besarla.
Cuando
se separaron se miraron a los ojos. Christian la miraba con unos ojos
intensos, unos ojos que aun le producían a Victoria escalofrios por
el cuerpo cuando los miraba.
-Te
quiero… Christian.
-Y
yo a ti.
Se
quedaron abrazados disfrutando del momento que tanto habían añorado,
hasta que victoria rompio el silencio.
-
Sera mejor que me valla...es muy tarde y no quiero molestarte,
querrás descansar y seguro que Jack estará preocupado...-dijo
Victoria levantandose del sofá.
-De
eso nada..-dijo Christian cogiéndola del brazo- tú te quedas esta
noche conmigo. Y no creo que le pase nada al dragón, sabe
apañarselas solo ¿no?-le dijo con una media sonrisa.
Victoria
solo sonrió.
Aquella
noche Jack sabía que Victoria no regresaría hasta la mañana
siguiente. Y no se lo reprochaba porque, entendía que quería pasar
tiempo con Kiratsh. Hacía mucho tiempo que no estaba con él y lo
echaba de menos.
-¿Papa
y la mama?- pregunto Erik.
-La
mama esta en casa de Christian-le contestó.
-¿Y
porque?- preguntó Erik.
-Porque
hacía mucho tiempo que no lo veía y quería estar con él-contesto
Jack.
-Pero
no te preocupes porque mañana ya estará aquí con nosotros, vale-
dijo Jack acariciandole el pelo.
Cuando
Victoria despertó a la mañana siguiente, lo primero que vió al
girarse fue a Christian todavía durmiendo a su lado. Lo normal era
que se fuera temprano, pero esa vez se habia quedado con ella y eso a
Victoria la llenó de felicidad. Victoria aprovechó que estaba
durmiendo y le acarició el pelo con mucha dulzura y se acurruco a él
mirándolo. Cuando Christian se despertó lo primero que vio fue a
Victoria que le miraba con una dulzura que a Christian le enamoraba
aun mas de ella.
-Buenos
dias..-le dijo Victoria.
-Buenos
dias..-le contestó y lo siguiente que hizo fue besarla.
Se
acurrucaron los dos en la cama. No querían levantarse. Querían que
el tiempo se congelara y los dejara disfrutando de la presencia de la
persona que mas amaba y que había añorado mucho.
-¿Crees
que conseguiremos acostumbrarnos a la vida de la Tierra?- preguntó
Victoria, rompiendo aquel momento.
-No
veo porque no.. será dificil, almenos para los niños y para Jack,
que hace mucho que no regresaba a la Tierra, pero saldreis adelante-
le contestó Christian acariciando el pelo a Victoria.
-Eso
espero...-fue lo único que contestó Victoria.